Poesía para compartir
LA MANO CONOCE
Cuando la Mano llega,
damos palmas de ilusión,
pues con ella forjamos,
lo que viene de la creación.
Aunque la Mano es una,
en realidad son dos,
pues hay una en cada brazo
ayudándose con amor.
Tus manos pueden ser
grandes o pequeñas,
gruesas o delgadas,
habilidosas o torpes.
Pero, ¡son tus manos!
Míralas, contémplalas.
¿Hay algo más bello?
Con ellas todo lo puedes crear.
Su acción es conocer.
¡Qué importante es!
Si desconoces,
¿adónde te puede llevar?
Su poder es realizar,
y ¡qué verdad es!
Con ellas maniobramos,
mucho nos ilusionamos.
Su esencia es la sanación,
¿Se trata de imposición de manos?
¿De transmisión de energía?
¿De curar nuestros cuerpos?
Su número es el siete
¿Qué te evoca?
Es la resonancia armónica
contenida en lo místico.
Su color es el azul.
Con él paciencia tendrás,
ya que es el paso previo
para la conducta transformar.
En los arquetipos galácticos
la Mano es el Avatar,
de las formas es el creador,
de los mundos futuros el constructor.
Párate por un momento,
observa tus manos de nuevo
¿Existe algo más útil?
¿Valoras su potencial?
Para poder crear,
a tus manos recurres.
Es un acto involuntario,
al que estás acostumbrado.
¿Qué puedes realizar?
Con ellas, ¡todo!
La derecha es más diestra,
pero en otros es la izquierda.
Cada mañana al levantarte,
¿Qué es lo primero que haces?
Restregar los ojos con tus manos,
dando gracias por despertar.
De nuevo las utilizas,
para desnudarte y vestirte;
primero te lavas la cara
después tus cabellos peinas.
Y de ahí en adelante
todo lo hacen tus manos,
allá donde vas,
ellas se mueven contigo.
Y es que, ¡son tan necesarias!
Sin ellas, ¡uf!
No sabrías cómo moverte,
ni de qué manera ir por la vida.
El conocimiento que te dan
va más allá de las formas,
guardando en su interior
aquello que puedes sanar.
Y con el discernimiento,
tomas la decisión,
de qué quieres realizar
para tu vibración elevar.
Son maravillosas.
Las miras y sonríes,
le das las gracias a Dios,
por la ayuda que te dan.
De esta manera, la Mano,
con su poder y movimiento,
ayuda a la humanidad,
a avanzar como un Avatar.
Con el servicio de la Mano,
siempre podrás llegar,
a la iluminación divina,
para en la casa de Dios estar.