Hoy les quiero compartir un texto que nos envió mi profesora de calendario maya que dice asi.
En la Rueda Chamànica, el equinoccio es la època crìtica de los cambios. En la estaciòn del Otoño, donde el calor disminuye, y la luz se va alejando, la naturaleza se prepara para el sueño del invierno, es un tiempo de balance, donde el poder interior impulsa a proyectarse, impulso que afecta, cambia y transforma, y esto empieza a verse en nuevas formas.
Las energìas se preservan, se administran, la casa cierra sus puertas y ventanas màs temprano, los vientos del otoño limpian y barren el suelo, transportan las semillas y enfrìan el aire. Es el momento de la reserva y de la conserva. Recolectamos los frutos del verano, conservàndolos como alimento para el invierno, guardamos sus semillas, y descansamos equilibrando fuerzas. En otoño es la ùltima etapa de la cosecha, por lo que se agradece se celebra su llegada, y se pide por la cosecha que vendrà.
Estamos màs fuertes intelectualmente, y el alma se prepara para la gran transformaciòn que vendrà. Todo lo conquistado se transforma en fuerza potencial, que alimenta el vientre del renacimiento personal, asì tambièn la tierra toma todo lo que le damos y lo transforma en nutrientes y alimento para su ser. El equinoccio nos muestra que todo termina para poder renacer.
Bienvenida la Noche y su introspección. Inlak´ech. Analía. Viento Magnético.