Sello Águila
Este sello simboliza la visión.
La visión de la verdad y de la realidad, tal como es, objetiva, vista con neutralidad e integrando todas las partes, sin ser teñida de emociones o parcialidades.
Sale del juego de polaridad, ve todo integrado, deja de lado la ilusión y por todo esto es libre.
El Águila posee la distancia interna suficiente para poder apreciar todo el panorama sin quedar involucrado y sin perder perspectiva.
No busca la verdad, LA VE. Se presenta ante sus ojos y eso le permite transformar sabiendo exactamente que es lo que hace y para qué lo hace.
Lo único que debe tener en cuenta es no descuidar el detalle ya que al verlo todo puede perder el foco de su objetivo.
Las águilas están íntimamente relacionadas con el planeta, vibran con él, traen la verdad. Sienten la necesidad de transformar el entorno, con su visión integrada de la realidad, ponen toda su energía de transformación al servicio de la Tierra, ayudando a concretar posibilidades de cambio.
Las dificultades para el águila se presentan cuando no quiere ver, al negarse a aceptar lo que ven sus ojos. A veces la verdad puede ser dolorosa, ver las situaciones tal como son, hace imposible la actitud del distraído, se sabe lo que es lo que uno tiene enfrente a sus ojos y tiene que hacer algo con ello. Entonces anímate a volar para ver todo el panorama desde arriba, y no solo desde la rama del árbol donde estas parado. Si vuelas como un águila, podrás ver todo el bosque.
Un águila tiene que aprender a volar , allá muy alto, cada vez más alto en el infinito cielo, un águila sola, con la mirada más atenta que existe, observando todo, al mismo tiempo, con las alas abiertas, en una inmovilidad absoluta, con el viento sonando como un silbido agudo entre cada una de sus plumas, un águila, con su presencia celeste, su placidez abarca el paisaje entero, es una mirada cierta, una meditación intensa que se apodera de nosotros podrás entonces llenarte de aires nuevos, despegarte un rato de la mediática forma de las cosas, para verlas de lejos, elevarte lo que haga falta de los que a veces te opaca y te nubla la vida, es que de allá, desde lo alto parece más pequeño todo lo que desde aquí es tan grande.
El águila se apodera de tu conciencia para verte presente en una realidad más amplia, en una realidad más grande que lo que parece todo, se trata de que seas capaz de dejarte un poco desapegar de lo que te aferra, alejarte un poco de creer que lo que ves es todo. La altura de ese vuelo silencioso podrá dejar atrás lo que se ha ido, podrá poner las cosas en su justa medida, podrá hacer que el mínimo espacio en que se posa un paso, sea sólo eso en el medio de una infinidad inimaginable en su dimensión y en su esencia.
Mientras más alto se vueles más amplia es la perspectiva, mientras más amplia es la perspectiva, más comprensión, más compasión por la vida, mientras más alto se vuela, más se ve de la vida, ya no es tan sólo este evento, este difícil momento, ya no es más este adiós todo lo que queda, ni lo es este duelo, este dolor o este encierro, ya no es más esta casa todo lo que es posible en la vida.
Desde la lectura precisa, desde allá arriba es mucho más amplia la vida que la monótona semana, que la rutina diaria, es mucho más grande que la calle en que habitualmente caminas, hay mucha más gente que la persona precisa que te roba la calma, es mucho más grande la vida que el pedazo de la ciudad en que te mueves y es mucho más todavía que el país, que el continente, que la tierra, el planeta, el cosmos, que el universo entero, es tan grande e infinito que “ la Casa Central de la Galaxia está en ti y en todas partes al mismo tiempo”, y si así de grande ves todo, entonces podremos hacer el esfuerzo por algo más general que un poquito de algo, podremos reconocernos inmensos y eternos, porque de reconocer el total se hace más bella la vida, saber que lo ves, que eres parte de él, que de todo lo inmenso eres tú testigo, eres tú una conciencia y que de todas partes conciencias se abren, se unen como si fuera un primavera de flores blancas, abriéndose todas en un mismo instante, haciendo este vuelo gigante para sentirse parte de una gran conciencia.
El poder de la visión del águila es así de alto, no se puede quedar acorralado, no se puede mantener aferrado, no se puede limitar con muros no importa de qué material estén hechos.